Alambres de oro: Las aleaciones de
oro carecen de gran dureza, lo que se puede mejorar sometiendo la aleación a un
proceso de fricado durante la fabricación del alambre. Además, pueden ser
potencialmente endurecidas con un tratamiento térmico que se aplica cuando el
alambre es forjado.
Alambres de acero: Presenta dureza mediana, elasticidad,
maleabilidad y es fuerte si no se trabaja en demasía.
Debe usarse en el estado en que se compra, no
es factible utilizarlo con calor; este alambre está indicado para trabajar
durante todas las fases del tratamiento.
Los alambres de acero presentan bajos niveles
de fricción entre el brackets y el alambre, pueden ser soldados y presentan
buena resistencia a la corrosión; muy usados en la aparatología removible,
extraorales y arcos para técnicas fijas; se presentan en forma de rollos,
varillas o preformados y pueden ser rectangulares, cuadrados o redondos.
Alambres de cromo cobalto: Se caracterizan por presentar gran
resistencia a la fatiga y a la distorsión, poseen buena capacidad para ser
doblados y baja fricción entre el alambre y el brackets; el resto de las
propiedades son similares a las de los alambres de acero.
La soldadura en estos alambres puede provocar
cambios en su estructura, que causarían una disminución del campo de fuerza y
en la resistencia a la tracción.
Alambres de níquel titanio: Su
comportamiento es superelástico y desarrollan fuerzas uniformes; se presentan
redondos, cuadrados y rectangulares, más utilizados en forma de arcos
preformados para las primeras fases del tratamiento, sobre todo el nivelado y
alineación.
Alambres de niticobre: Su diferencia con las demás aleaciones es su
capacidad para lograr una transformación martensita termoelástica, o sea, un
cambio estructural cristalográfico programado reversible, lo que da la base
para alcanzar los elevados grados de recuperación que logra este material.
Alambre australiano: Alambre
redondo de acero inoxidable a la austenita, tratado en caliente y estirado en
frío hasta alcanzar su diámetro, a partir de un alambre redondo de mayor
diámetro para darle las propiedades necesarias de resiliencia, dureza y
resistencia a la tracción. Sometido a tratamiento de calor que combina el
equilibrio entre la dureza y la resiliencia con la propiedad única de
relajación de tensión cero.